viernes, 20 de julio de 2018

LAS CROQUETAS DE LA ABUELA (VEGANA)

Esta receta, como todas las de las abuelas, admite miles de variaciones.
Las croquetas son de esas cosas que forman parte de la familia desde generaciones. Es como una especie de herencia familiar.
Las mejores croquetas, por supuesto, siempre son las de mi madre y las de tu madre.
Sin pretender llegar a ese nivel Dios de croqueta, os traigo mi receta, con un sencillo truco para que nunca se hagan grumos.
Las proporciones que utilizo son para que quede una masa de croquetas tierna pero manejable. Por supuesto, si os gustan más blanditas podeis echar un poco más de líquido, y si os gustan más contundentes, más harina (o menos líquido)
En el TALLER DE CROQUETAS que dimos en el RINCON LENTO de Guadalajara, hicimos dos versiones de este delicioso bocadito, uno tradicional con harina de trigo, y otro con harina de garbanzos apto para celíacas. Los rellenos fueron en este caso de calabacín rallado y boletus deshidratados, pero podéis rellenarlas con lo que más os guste, con lo que os haya sobrado, o con cualquier cosa. SIEMPRE QUE SEA VEGANO, CLARO!!!
Bueno, esta es mi receta:
- Harina (de trigo o de garbanzo): 40 gr.
- Leche de soja (o caldo): 375-400 ml.
- Aceite: 60 ml***
- Sal, pimienta, ajo picado

***Este es el truco para que la bechamel no haga grumos. Normalmente, no me gusta utilizar demasiado aceite en las comidas, pero para hacer croquetas, hay que ser generoso con él. Debe haber suficiente para que toda la harina se empape, y deshacer los pequeños grumos que tienden a hacerse es mucho más fácil en el aceite que en el líquido.
Una vez que tengamos toda la harina disuelta en el aceite, el siguiente truco es ECHAR LA LECHE DE GOLPE en la sartén y, por supuesto, remover constantemente durante unos 10-12 minutos, a fuego medio-suave para que no borbotee demasiado.
Así quedó la masa mientras se estaba haciendo:
Una vez hecha la masa, añadimos el relleno, en este caso fue un pequeño puñado de boletus deshidratados remojados.
En esta versión en particular, sustituimos parte de la leche de soja por el agua de remojar los boletus, y quedaron unas croquetas con un sabor increíble.
Después, las formamos y rebozamos como se hace de toda la vida, sustituyendo el huevo batido por esta fórmula: 
[fórmula 1/2-1-2-4]:
* 1/2 cucharada de harina de arroz
*    1 cucharada de vinagre (de manzana)
*    2 cucharadas de harina de garbanzo
*    4 cucharadas de agua o leche vegetal
* Sal y pimienta
Mezclamos hasta conseguir la consistencia del huevo batido. Usar de la misma forma.

Luego las freímos y nos las comimos. 
No puedo subir fotos de ellas, porque VOLARON!!!
Espero que las vuestras también vuelen de la mesa.

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